viernes, 17 de diciembre de 2010

MOUSSA AG ASSARID

No sé mi edad: nací en el
desierto del Sahara, sin papeles...!
Nací en
un campamento nómada tuareg entre Tombuctú y Gao, al norte de Mali. He
sido pastor de los camellos, cabras, corderos y vacas de mi padre. Hoy
estudio Gestión en la Universidad Montpellier.- Francia.- Estoy soltero.
Defiendo a los pastores tuareg. Soy musulmán, sin fanatismo

- ¡Qué turbante tan hermoso...!-
Es una fina tela de algodón: permite tapar la cara en el desierto
cuando se levanta arena, y a la vez seguir viendo y respirando a su
través.

- Es de un azul bellísimo...- A los tuareg nos llamaban los "hombres azules" por
esto: la tela destiñe algo y nuestra piel toma tintes azulados...

- ¿Cómo elaboran ese intenso azul añil?- Con una planta llamada índigo,
mezclada con otros pigmentos naturales. El
azul, para los tuareg, es el color
del mundo.

- ¿Por qué?- Es el color
dominante: el del cielo, el techo de nuestra casa.-
¿Quiénes son los tuareg?

- Tuareg significa
"abandonados" , porque somos un viejo pueblo nómada del desierto,
solitario, orgulloso: "Señores del Desierto", nos llaman. Nuestra etnia
es la amazigh (bereber), y nuestro alfabeto,( el tifinagh ).-.

- ¿Cuántos son?- Unos tres
millones, y la mayoría es todavía nómadas. Pero la población decrece...
"¡Hace falta que un pueblo desaparezca para que sepamos que existía!",
denunciaba una vez un sabio: yo lucho por preservar este pueblo, que es
mi pueblo.-

- ¿A qué se dedican?- Pastoreamos
rebaños de camellos, cabras, corderos, vacas y asnos, en un reino de
infinito y silencio...

- ¿De verdad tan silencioso es el desierto?-
Si estás a solas en aquel silencio, oyes el
latido de tu propio corazón. No hay mejor lugar para hallarse a uno
mismo.

- ¿Qué recuerdos de su niñez en el desierto
conserva con mayor nitidez?- Me despierto con el sol. Ahí están las
cabras de mi padre. Ellas nos dan leche y carne, nosotros las llevamos a
donde hay agua y hierba... Así hizo mi bisabuelo, y mi abuelo, y mi
padre... Y yo.


¡No
había otra cosa en el mundo más que eso, y con eso,......yo era muy
feliz en él!- ¿Sí? No parece muy estimulante. ...

- Mucho. A los siete años ya te
dejan alejarte del campamento, para lo que te enseñan las cosas
importantes: a olisquear el aire, escuchar, aguzar la vista, orientarte
por el sol y las estrellas... Y dejarte
llevar por el camello, si te pierdes: el te llevará a donde hay agua,
no te preocupes.-

- Saber eso es valioso, sin duda...-
Allí todo es simple y profundo. Hay muy pocas cosas, ¡y cada cosa tiene enorme valor!

- Entonces este mundo y aquél son muy diferentes, ¿no?- Allí, cada pequeña cosa
proporciona felicidad. Cada roce es valioso. ¡Sentimos una enorme
alegría por el simple hecho de tocarnos, de estar juntos! Allí nadie
sueña con llegar a ser, ¡porque cada uno ya es!

- ¿Qué es lo que más le chocó en su primer viaje a
Europa?- Vi correr a la gente por el
aeropuerto.. ..¡ ¡ ¡ ¡En
el desierto sólo se corre si viene una tormenta de arena! Me asusté,
claro...

- Sólo iban a buscar las maletas, ja, ja...-
Sí, era eso. También vi carteles de chicas desnudas: ¿por qué esa falta
de respeto hacia la mujer?, me pregunté... Después, en el hotel Ibis,
vi el primer grifo de mi vida: vi correr el agua... y sentí ganas de
llorar.

- Qué abundancia, qué derroche, ¿no?- ¡Todos los días de mi vida habían consistido en buscar agua! ¡
¡ ¡ ¡ Piense......Cuando veo las fuentes de adorno aquí y allá, aún
sigo sintiendo dentro un dolor muy grande ante el derroche.-

- ¿Tanto como eso?- Sí. A
principios de los 90 tuvimos una gran sequía, murieron los animales,
caímos enfermos... Yo tendría unos doce años, y mi madre murió...
¡Ella lo era todo para mí! Me contaba historias y me enseñó a contarlas
bien. Me enseñó a ser yo mismo.

- ¿Qué pasó con su familia?- Convencí a mi padre de que me dejase ir a la
escuela. Casi cada día yo caminaba quince
kilómetros. Hasta que el maestro me diò una cama para dormir, y una
señora me daba de comer al pasar ante su casa... Entendí: era mi
madre,.... que me estaba ayudándo..

- ¿De dónde salió esa pasión por la escuela?-
De que un par de años antes había pasado por el campamento el rally
París-Dakar, y a una periodista se le cayó un libro de la mochila. Lo
recogí y se lo di. Me lo regaló y me habló de aquel libro: " El Principito ". Y yo me prometí que un
día sería capaz de leerlo...

- Y lo logró.- Sí. Y así fue
como logré una beca para estudiar en Francia.- ¡Un
tuareg en la universidad. ..!

- Ah, lo que más añoro aquí
en Francia........es la leche de camella... Y el fuego de leña. Y
caminar descalzo sobre la arena cálida. Y las estrellas: allí las
miramos cada noche, y cada estrella es distinta de otra, como es
distinta cada cabra... Aquí, por la noche, miráis la tele.

solo la tele.....- Sí... ¿Qué es lo que peor le parece
de aquí?-
Tenéis de todo, pero no os basta. Os quejáis. ¡En Francia se pasan la
vida quejándose! Os encadenáis de por vida a un banco, y hay ansia de
poseer, frenesí, prisa... En el desierto no hay atascos, ¿y sabe por
qué? ¡Porque allí nadie quiere adelantar a nadie!

- Reláteme un momento de felicidad intensa en su lejano
desierto.- Es cada día, dos horas antes de la puesta
del sol: baja el calor, y el frío aun no ha llegado, y hombres y
animales regresan lentamente al campamento y sus perfiles se recortan en
un cielo rosa, azul, rojo, amarillo, verde...

- Fascinante, desde luego....- Es un momento mágico...
Entramos todos en la tienda y hervimos té. Sentados, en silencio,
escuchamos el hervor... La calma nos invade a todos: los latidos del
corazón se acompasan al pot-pot del hervor...

- Qué paz...-
Aquí tenéis reloj para saber la hora,.....allà tenemos el tiempo que
pasa lento, mientras escuchamos, .. sin apuro, como hierve el te.-

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